Buenos días a todos y todas. Esta misma mañana he acudido a mi visita mensual con mi tocóloga, la de la semana 29 de gestación y os voy a comentar cómo ha ido la visita, los resultados de mi prueba de la curva larga de la glucosa y otras recomendaciones de mi tocóloga.
Hoy he acudido a mi cita mensual, que no trimestral gracias a mi seguro de salud privado, un poco más nerviosa de lo normal. Como os dije en mi artículo de la semana pasada, tuve que hacerme la prueba de la curva larga de la glucosa, ya que en mi primera prueba me dio un valor de azúcar en sangre más alto de lo normal. Tuve que hacer tres días de dieta rica en hidratos de carbono antes de hacerme la prueba que duró tres horas en total.
Hoy mismo me han dado los resultados y la verdad que no podría estar más contenta, ¡salió negativa! Mis niveles de azúcar son perfectamente normales y me he librado de tener que seguir una estricta dieta de aquí al final del embarazo que se supone que es dentro de 77 días. Así que a todas vosotras que os ha salido positivo el Test de O'Sullivan, no desesperéis, puede que sea un falso positivo.
A estas alturas del embarazo, también me han empezado a dar ardores de estómago, algo muy normal entre las embarazadas, y no, no es porque el bebé vaya a ser muy peludo como dicen las abuelas, sino por la posición del estómago debido al desplazamiento superior por el útero. Me han recetado unos comprimidos efervescentes, aunque el Almax hace maravillas también.
También hoy me han indicado que me tengo que poner la vacuna antiglobulina ya que soy RH negativo. Esta vacuna es necesaria ya que mi pareja es RH positivo, por lo que debido a esta combinación podría derivar en problemas para la salud del bebé, llegando a atacar mis anticuerpos sus glóbulos rojos. Esta vacuna he tenido que pagarla, ya que no entra por el seguro médico y me ha costado unos 55 euros.
En esta visita de la semana 29 de embarazo, también me han hecho una ecografía, pero esta vez no se ha dejado ver mucho pero el bebé parece que está encajado ya, cabeza abajo, aunque siempre cabe la posibilidad de que se mueva antes del día del parto. ¡Esperemos que no sea el caso!