Una vez contratado nuestro seguro médico podremos acceder desde el primer momento a todas aquellas asistencias sanitarias o servicios médicos que necesitemos para proteger nuestra salud frente una enfermedad.
Aunque tendremos que informarnos sobre determinados periodos de carencia que nos imponen algunas compañías frente al uso de determinados servicios médicos, como por ejemplo el más común que suelen poner es ocho meses de periodo de carencia en relación al parto.
Pero si nuestra compañía aseguradora no nos pone periodos de carencia podremos acudir desde el primer día a realizar aquellas asistencias y servicios médicos a la clínica médica que prefiramos dentro del cuadro médico, con tan sólo presentar nuestra tarjeta sanitaria.